FuryRed núm.4
Guión: Zarzuelo Cabañas
Fotografia de Portadas: Luis Mariano Gomez Pascual
Ahora:
en un lugar del planeta
-¿Pero
qué cojones esta pasando?
-Señor...
-Ni
señor ni hostias ¡Explicadme como puede ser que en un año hayan
asesinado a tres de nuestros pilares fundamentales del Reino: el
pilar financiero, el textil y el de la construcción!
-Señor...
-¿Quién
es el puto FuryRed?
Tras
estas palabras enérgicas Mr. Cap. se sentó, abrió una botella de
Yamakazy, y moviendo lentamente el vaso con hielos, di un sorbo:
-¿Qué
me podéis decir?
-En
realidad... nada.
Al
escuchar la titubeante respuesta, lanzó con fuerza el vaso a la cara
del que respondió, se levantó y golpeó la botella de Yamakazy
sobre el segundo, con la botella rota segó el cuello del primero, y
a continuación agarró la cabeza con su mano derecha y empezó a
golpear con ella al segundo hasta que dejó de gemir.
-Alfredo
-Si
señor
-Lo
siento, se me ha ido de las manos. Ocúpate de ellos.
-
No se preocupe señor, ya tenemos nuevo verdugo al que culpar.
-Alfredo, búscales
unos sustitutos.
-Si
señor, prepararemos unas nuevas elecciones.
-Alfredo
-Si
señor
-Llama
a Mac
-No
se preocupe señor.
Se
colocó unos guantes en ambas manos y arrastró hacia un ascensor que
se encontraba en el fondo del despacho el cadáver decapitado,
posteriormente tiró del otro cadáver y finalmente recogió la
cabeza ensangrentada. Tras fregar de manera exhaustiva el suelo, se
dirigió al ascensor y descendió al último piso. Se lavó las
manos, se colocó otro par de guantes y abrió un armario del que
cogió un martillo.
-¿Si?
-Tenemos
un trabajo para usted
Ahora:
En un lugar del Reino.
-Joder,
Matthew, te has pasado de la raya
-¿Yo?
¡Y ellos!
-¡Joder,
ellos no asesinan a nadie!
-¿No?
Y quien es la causa del que se suicida por no poder pagar una
hipoteca al quedarse sin trabajo y solo ve como solución el cobro
del seguro de vida. O aquel que fallece en un accidente de tráfico
con su furgoneta al ir con exceso de velocidad para cumplir unos
horarios que le hacen ser competitivo. O el que trabaja en la
construcción con el casco y el arnés proporcionado por la empresa
pero sin línea de vida a la que atarse.
-Joder...
pero esos casos
-¿Son
accidentes? Por favor Peter, es como Don Amancio, que ante la noticia
de que su ropa era realizada por esclavos, señalaba que de aquello
era responsable la empresa subcontradora. ¡Será hijo de puta!
-Jode
Matthew, bien sabes que en eso pensamos igual, pero, joder, asesinar
es otra cosa.
-¿Por
qué ? Solo con el patrimonio de las cinco personas más ricas del
mundo se podría erradicar la pobreza. ¡Y esas cinco putas personas
no lo hacen! ¿Al no hacerlo no son causantes de ese genocidio?
-Joder,
si te entiendo, pero.. matar. Joder, nosotros no somos del tipo de
personas que matamos a los demás.
-Peter,
fuiste tú quien me dio la lista.
-Joder,
pero... como... comentario.
-No,
yo te pregunte, ¿Si pudieses matar a cinco personas del Reino,
quienes serian? Y tú me respondiste con cinco nombres
-Joder,
pero nosotros no podemos matar a esas personas.
-Yo
si.
-¿Por
qué?
-Cuando
gane los 137.3 millones de euros, en todos los bancos me decían como
de manera sencilla esa suma se podía multiplicar y recuerdo que con
la intención de que les dejase el dinero a su cargo, decían, "así
usted puede hacer lo que quiera, lo que le plazca". Y eso es lo
que hago, lo que me place:Justicia.
-No
se Matthew, no se. Aún así, has ido más allá dé la lista
-Aun
no.
-¿Como?
¿Y lo de los putos presidentes?
-¿Se
me ha acusado?
Matthew
coge de la mano a su amigo
-
Lo de los presidentes... Yo no he sido.
-Pero...
-Ya,
se me ha acusado y han mostrado una especie de pauta similar. Pero yo
no he sido.
-¿Entonces?
-Quieren
que yo cargue con esos muertos. Y no me extrañaría que fuesen a por
mi.
-Joder.
-Es
por ello que te necesito.
-¿Pero
qué quieres que haga?
-¿Qué
puedes hacer con varios miles de millones de euros?
-Todo.
A
continuación hablaron sobre el trabajo de Peter en el Ministerio de
defensa y de la manera en la que Matthew había multiplicado su
dinero, pero fundamentalmente conversaron sobre los nuevos planes de
defensa, tanto de alistamiento, en lo que denominaron INC. como de la
construcción de Tetrés.
Tras
ello se despidieron con una sonrisa y un fuerte abrazo. No habían
dado ni tres pasos cuando Peter se da la vuelta y pregunta:
-¿Entonces
tienes decidido matar a esos dos?
-Si,
se lo merecen.