FuryRed núm. 2
Fotografía de portada: Luis Mariano Gomez Pascual
Guión: Zarzuelo Cabañas
-Pasados seis
meses se sigue sin tener un avance en la investigación sobre el
asesino conocido como FuryRed.
Apenas dos personas
estaban a esas horas de la noche tomándose un último vino en la
taberna, el más viejo pero de ropa mas nueva, comentó al escuchar
las palabras que salían del viejo televisor:
-Un loco como ese
puede estar en cualquier sitio ocultándose
137,3 millones de
euros hace viable el refrán, "las prisas son malas compañeras".
Cuando obtienes una cifra como aquella, muchos abandonan el lugar
donde viven e intentan pasar desapercibidos. Cosa de ricos.
De esa forma sobria
de pensar era Don Amancio. Explotaba y acumulaba, explotó primero a
mujeres del reino de las brujas, luego a niños de Vietnam, China o
Brasil, y acumuló primero reales, luego euros, pero aun siguiendo
ese ciclo mortal, solo pedía a la vida, tranquilidad en un viejo y
pequeño pueblo. Era de ese tipo de capitalistas de la vieja usanza
que prefiere salir a cazar perdices que salir a navegar el yate, lo
cual no impide pedirle al sol ganar cada día siempre un poco mas.
En una fresca mañana
de estampa de Santos Inocentes o de Escopeta Nacional, Don Amancio
sustituyó a su viejo compañero por aquel joven, cansado de ver que
era el que menos cazaba.
-Tu te vienes hoy
conmigo.
Aquel día fue el de
mayor caza en años de Don Amancio, cayeron perdices, conejos y ya
para terminar el día, un ciervo y un jabalí. Tal acto mereció que
Don Amancio lo celebrase con su nuevo ayudante en la taberna.
- Ya no son
horas, pero un día es un día. ¿Dónde aprendiste todo lo que
sabes?
No todo lo da el
dinero, un nadie tiene su abuelo del pueblo, un nadie cuando es niño
se impresiona al tener entre sus manos un arma de fuego.
-Tu debes
aprender a cazar sin armas - viejas palabras de un abuelo pobre
que era tierra y trampa - Las armas de fuego son para los
señoritos.
Y un nadie con 137,3
millones de euros tiene tiempo, no para esconderse sino para
encontrar con tranquilidad y escuchar: Don Amancio.
El ultimo trago de
vino fue escuchando las palabras de la presentadora del telediario:
-¿Un loco como
ese puede estar en cualquier sitio ocultándose ?
Y ya con el vaso
vacío y percatándose de la hora que marcaba su Patek philippe dijo:
-Ya es hora de
regresar a casa. Vamos.
En mitad del camino
sin asfaltar hasta la finca, anocheció y el Land Rover pinchó.
-Vosotros dos
bajad y ayudad al chico que hoy no ha parado de trabajar, no como
vosotros.
Los escoltas bajaron
de mala gana, a sabiendas que cualquier recriminación no valía más
que el despido. Y mientras tres cambiaban la rueda del mastodonte,
uno encendía un Her majestic y se ponía transcendental al expulsar
el humo lentamente.
- Uno puede creer
que tiene todo, pero ahí tienes la luna que todas las noches me dice
que no es mía. Esas palabras me las contaba mi pobre abuelo, que era
sabio a pesar de ser analfabeto. ¿Te gusta la poesía?
-No, me gusta la
justicia.
El cigarro se le
cayó de las manos al encontrarse frente al kalashnikov.
-Baja y desnúdate
gordo.
En el suelo junto a
la rueda pinchada se encontraban los dos escoltas con un martillo
clavado en la cabeza.
-Me lo imaginaba
¿Cómo alguien como usted va a vestir con ropa realizada bajo la mas
vergonzante explotación en un país oriental o suramericano? No,
aquí el puto Amancio viste de italiano, como tiene que ser, ¿como
va ir vestido con ropa tejida en un taller clandestino por niñas que
trabajan doce horas gratis?
-Por favor, yo no
sabia.
La primera bala le
atravesó la grasienta papada, la segunda le hizo una liposución en
su abultada barriga y la tercera al corazón.
-Pues haberlo
sabido, cabrón.
Fue a la mañana
siguiente cuando encontraron a los tres muertos:
-El hombre más
rico del reino asesinado por un don nadie- fue el titular
compartido por todos los periódicos.
¡Aquellas palabras
si que eran poesía !
Tuvieron que pasar
un par de días hasta que la inteligente policía científica
comparase los martillos, siendo entonces cuando los telediarios
abrieron:
-FuryRed vuelve
asesinar.
¿Cuándo abrirán
los telediarios no sobre las pésimas condiciones de vida y laborales
de los millares de los talleres clandestinos existentes a lo largo
del mundo, sino sobre los asesinos dueños de las marcas que lo
causan?
El segundo de la
lista fue tachado.